sábado, 15 de noviembre de 2008

Más sobre la elección de Obama

Hace días que quería publicar este post, pero no he tenido tiempo. Sigo con ideas esbozadas en posts anteriores sobre la elección de Obama. ¿Los resultados de las elecciones se explican por las características del liderazgo de Obama, o por un cambio en las preferencias de republicanos a demócratas después de ocho años de Bush? Parece que lo segundo:

"Obama won 53% of the two-party vote, congressional Democrats averaged 56%. The average swing of 5.7% from Democratic congressional candidates in 2004 to Dems in 2008 was actually greater than the popular vote swing of 4.5% from Kerry to Obama". Ver:

http://redbluerichpoor.com/blog/?p=260

En general, ver el blog y la página web "Red State, Blue State, Rich State, Poor State" (Why Americans Vote the Way They Do). Muy ilustrativo.

http://redbluerichpoor.com/blog/

Este tema también es comentado por Krugman:

http://krugman.blogs.nytimes.com/2008/11/10/bigger-than-barack/

De otro lado, en este blog en varias oportunidades hemos comentado la necesidad de "volver al futuro", de evaluar lo acertado o equivocado de nuestros pronósticos, y analizar por qué se acertó o se erró.

http://martintanaka.blogspot.com/2008/11/volver-al-futuro.html

En este sentido ver:

How wrong they were - "He cannot win," and other chestnuts. Remembering an election season full of fabulously wrongheaded predictions.

http://www.salon.com/news/feature/2008/11/06/bad_prediction/

Ver también:

"If I had a dollar for every Democrat who told me there was no way that Americans would ever turn against the war in Iraq or definitively reject Bush governance or elect a black man named Barack Hussein Obama president, I could almost start to recoup my 401(k). Few wanted to take yes for an answer.
So let’s be blunt. Almost every assumption about America that was taken as a given by our political culture on Tuesday morning was proved wrong by Tuesday night".
It Still Felt Good the Morning After
By FRANK RICH
Published: November 9, 2008

http://www.nytimes.com/2008/11/09/opinion/09rich.html

Yo no creo que errar en las predicciones sea necesariamente consecuencia de haber estado equivocado en el análisis, así como acertar en una predicción no necesariamente es consecuencia de haber hecho un buen análisis. Muchas veces sí, por supuesto; pero en el primer caso pueden intervenir elementos imprevistos, desconocidos; en el segundo, puede haber simplemente suerte. En la política es esencial la contingencia y la voluntad. Difficult to see. Always in motion is the future, como diría Yoda.

http://www.yodajeff.com/multimedia/sounds/episode5/future.wav

Lo que sí es muy útil es evaluar qué se sobrevaloró, qué se minusvaloró, qué fue inesperado, qué cambió, y qué podemos aprender de todo esto. Algo que se debe evitar en el análisis es caer en el "determinismo retrospectivo", asumir que lo que pasó estaba destinado a ocurrir, y obviar en el análisis la voluntad de los actores, sus aciertos, errores y omisiones, así como elementos contingentes y accidentales. Saludos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Martin,
Creo que las predicciones fueron correctas hasta el momento en que se cayo la Bolsa de Nueva York y se da la urgente necesidad de un paquete de ayuda a los grandes inversionistas, es decir, al sector que vive mejor en el mundo y en los Estados Unidos. Esto desencadeno una reaccion natural de furia y resentimiento contra Washington. Es decir, todo el malestar con la guerra, con la perdida de casas por parte de la clase trabajadora y la clase media baja, con el aumento del desemple, todos estos malestares se vieron magnificados con el destape de la manipulacion irresponsable especulativa de Wall Street.
En este contexto de profundo malestar, que tu bien identificaste en uno de tus comentarios, la figura de Obama sube a una gran velocidad. Sectores inpensables, como los estados del Sur y la Florida terminan votando por el.
Asi que lo que hubiera sido una prediccion acertada, es decir, que los Estados Unidos no estaban listo para un presidente Afro descendiente, se convierte en el camino, un poquito desesperado, que toma un pueblo que se sintio engañado por el partido Republicano y su defensa del Consenso de Washington.