Colaboración de Olga Celle, Ph.D. en Sociología, Universidad de California, Santa Cruz, 1995. Es peruana, Profesora adjunta de la Universidad de Maryland, University College, donde enseña sociología de las relaciones raciales y sociología urbana
La elección de Barack Obama como presidente de los Estados Unidos de Norteamerica ha sido una celebración global de la esperanza y armonía entre los pueblos. La raza de Obama no fue abiertamente discutida en los medios hasta el final de la campaña. El mismo candidato evitó convertir su raza en un tema de debate. Recién dos semanas antes de las elecciones los Republicanos McCain y Palin intentaron descalificar a Barack Obama pero no por su raza, sino mas bien con imágenes y estereotipos normalmente asociados con los no-europeos. Este ensayo comenta algunos aspectos raciales de la elección de Barack Obama a la presidencia de los Estados Unidos.
Barrack Obama es un abogado de 47 años, graduado en Harvard, la escuela de derecho más prestigiosa de los Estados Unidos. Se inició en la política como activista comunitario en los barrios pobres de Chicago. De ahí, logra ser elegido al Senado por el estado de Illinois en donde se distinguió por su compromiso Liberal con los más pobres, pero sin constituirse nunca en un desafío ideológico dentro de su propio partido. Obama era un joven y brillante senador Afro-Americano por el estado de Illinois, es decir, era parte del “Establishment.” No nos olvidemos que hasta su triunfo en la primarias Demócratas, Obama tenía problemas para diferenciar su programa del de Hillary Clinton. Y también, que tanto McCain como Obama votaron a favor de la aprobación por el Senado Norteamericano del plan de rescate del sistema financiero en Octubre de este año. Obama no es un revolucionario.
Sus logros en la campaña presidencial han sido varios. El primero es haber logrado ser elegido Presidente sin haber explicado en detalle el programa de política nacional y exterior que piensa implementar en un país con una economía en crisis y cuya amplia clase media no se encontraba cara a cara con la incertidumbre desde la Gran Depresión de los años treinta. Su libro The Audacy of Hope es una visión más que un proyecto concreto.
El segundo logro de Barack Obama explica el primero. Obama es el campeón de la política de bases. Su experiencia como activista comunitario le ha servido para orquestar su campaña por la Internet y dirigirse de manera directa y personal a sus seguidores potenciales por medio de mensajes a celulares. Sus entusiastas seguidores le han retribuido con modestas contribuciones monetarias las que multiplicadas por los millones de sus bases ha hecho que este hábil político lidere la campaña electoral con más recursos económicos en la historia de los Estados Unidos. También, le han sobrado voluntarios de todas las razas y edades que han ido de puerta en puerta recolectando adherencias a su candidatura. A todo esto debe añadirse sus grandes dotes de oratoria e impecable manejo de su imagen pública. Este conjunto de factores explica en parte este fenómeno carismático llamado Barack Obama que en el corto periodo de veinticuatro meses de campaña se ha constituido en el líder de millones de jóvenes, minorías étnicas y raciales, obreros, así como de Liberales recalcitrantes.
A pesar de ser hijo de una mujer blanca, Obama es considerado el primer presidente negro de los Estados Unidos. Esto es porque en Estados Unidos tanto los Afro como los Europeo descendientes aceptan la “regla de una gota” (One Drop Rule) aun vigente en la sociedad norteamericana aunque fue declarada inconstitucional en 1986. El One Drop Rule significa que solo una gota de sangre no europea te convierte en minoría racial. Hasta muy recientemente, los niños norteamericanos eran clasificados en los registros nacionales con la raza del progenitor que no era de raza europea. Esta era la penalidad institucionalizada a las uniones interraciales. Recién en el 2002 el censo abrió el abanico de opciones incorporando categorías para personas de origen bi- o multi-racial.
Irónicamente el ser identificado como negro favoreció a Obama al protegerlo de las acaloradas, bajas acusaciones y chistes de mal gusto que caracterizan las campañas electorales. Si la campaña Republicana se abstuvo de críticas severas a Obama fue por miedo a la reacción negativa de la población pues habría significado una ruptura con el acuerdo tácito de que “a las personas de color no se las insulta o menosprecia públicamente” sin pagar graves consecuencias políticas. Y sin embargo se dieron algunos intentos de desprestigio por parte de Palin que llegaron muy tarde como para pegar en los indecisos o en los Liberales conservadores quienes de todas maneras hubieran preferido un hombre blanco en la Casa Blanca. Una suerte distinta corrió Hillary Clinton quien siendo blanca pero mujer fue maltratada por la prensa al punto que el ex presidente Bill Clinton protestó calificando de despiadada la campaña mediática contra su mujer. En resumen, al no ser estrujada la imagen de Obama durante la campaña, al momento de votación el era el candidato cristalino y transparente...
Texto completo en:
http://martintanaka1.blogspot.com/2008/11/barack-obama-en-blanco-y-negro.html
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4 comentarios:
Celebro tu informativo comentario. Sin embargo,
creo que no subrayas lo suficiente que Obama no trabajó en el aire en "las bases", sino dentro de un sistema de partidos bien asentado, quizá demasiado, pero mejor es un sistema que ninguno. Muy aguda también tu comparación con el trato que la prensa dio a Hillary Clinton por ser mujer. A propósito parece que al nuevo gabinete formado por Simón no han ingresado tantas mujeres como en el anterior, pequeño problema de género, no?
Muy buen post.
Martín ¿podrías hacer algún comentario sobre los partidos en USA y estas elecciones?
Gracias.
Cm
Señor Tanaka:
El artículo de la doctora Celle es interesantísimo. Gracias por difundirlo.
Ya estoy cansado con esta pregunta que escucho en los medios locales: ¿cómo cree usted que afectará al Perú la elección de Obama?
Incluso en BBC WorldNews sólo encuentro eso que llaman wishful thinking.
Roberto de Lima
¿Por qué tanta excitación con el triunfo de Obama, que el artículo corrobora que es del establishment, y poca tolerancia y menos entusiasmo cuando triunfó Evo Morales en Bolivia?
¿Por qué causa furor que un afro gane en EE.UU. y no cuando un indio gana en Bolivia?
Saludos
VPC
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