El 1 de octubre pasado se realizó una de las “mesas verdes” en el Instituto de Estudios Peruanos, con María Isabel Remy, dedicada al tema “Modernizaciones truncas en la sociedad post-conflicto. A propósito del VI aniversario de la entrega del informe de la CVR”, con comentarios de Guillermo Rochabrún, Javier Torres y Carlos Iván Degregori. No pude ir porque se me cruzó con la clase en la universidad de mi curso sobre política comparada. Lamenté mucho no poder ir, porque se trata de un tema que me parece importantísimo y porque ese trío aseguraba una excelente discusión, como en efecto ocurrió. Gracias a la web del instituto pude ver los videos de la sesión, y no me aguanto las ganas de hacer unos comentarios. Para los que se la perdieron, los videos están aquí:
http://www.iep.org.pe/videos_modernizaciones_truncas.phpSobre la “modernización trunca”: podría ser que la etiqueta no sea la más adecuada, pero eso es lo de menos. Lo que está detrás tiene la virtud de poner sobre el tapete los desafíos que implica la expansión e intensificación de los intercambios de mercado en contextos de relativo aislamiento, el rápido cambio en las expectativas, la difusión de valores igualitarios, la “activación” social y política de grupos antes “quietos” y la necesidad de “incorporarlos” y representarlos en la arena política, la crisis de formas tradicionales de autoridad, el agotamiento de la producción agraria de reproducción simple ante otras formas de producción, etc., etc., (o sea, modernización) y cómo esos cambios generan tensiones, asimetrías, desarrollos desiguales y contradictorios, potencialmente conflictivos (su carácter “trunco”). El concepto tiene limitaciones, por supuesto, pero eso es cierto para todos los que usamos en las ciencias sociales. Claro que más me gusta eso de “desestructuración sin reestructuración”, como dice Rochabrún. Al respecto ver mi texto “Las relaciones entre Estado y sociedad en el Perú: desestructuración sin reestructuración. Un ensayo bibliográfico”. En:
América Latina Hoy, vol. 31, agosto 2002 (p. 189-218). Ediciones Universidad de Salamanca, España.
http://iberoame.usal.es/americalatinahoy/ALH-PDF-TIFF/ALHvol31/ALHvol31tanaka.pdf¿El concepto de modernización está teñido de teleologismo, tiene en mente un único modelo de modernización? No necesariamente. Esa impresión, me parece, es unilateral y seguramente tiene en mente el libro de Rostow
The Stages of Economic Growth, pero reducir la teoría de la modernización a Rostow es un abuso.
Una idea central de la literatura clásica de la política comparada es que el paso de una sociedad tradicional a una sociedad de masas, el paso de sociedades agrarias a sociedades capitalistas, es decir, los procesos de modernización, son fundamentales en la historia de los países, y que las maneras en que se dan determinan en gran parte la dinámica política de los países. Una idea central es que no hay un solo modelo de modernización, cada sociedad llega a su propia solución según las diversas coaliciones de clase que se forman, la manera en que se da la incorporación de sectores antes excluidos a la arena política, la naturaleza de sus Estados, los contextos internacionales, los legados históricos e institucionales, etc. Una cosa es la modernización en Inglaterra, otra en Japón, otra en Alemania, etc. No por nada estas nociones han sido usadas provechosamente por autores tan diversos como Barrington Moore (
Los orígenes sociales de la democracia...), Theda Skocpol (
Estado y revoluciones sociales), Samuel Huntington (
El orden político...), Seymour M. Lipset (
El hombre político...), Gino Germani (
Política y sociedad en una época de transición...); y más contemporáneamente por Collier y Collier (
Shaping the political arena...), por mencionar solo algunos.
Dicho sea de paso, casi todos esos textos están en la bibliografía del curso que me impidió estar en la reunión. Ver:
http://martintanaka.blogspot.com/2009/08/syllabus-de-analisis-politico-comparado.htmlMe llama la atención el rechazo a un concepto asociable a la teoría de la modernización (“modernización trunca”) en el marco de un debate sobre la contribución de la CVR, cuando por ejemplo el propio Carlos Iván Degregori utilizó extensamente esa teoría en su libro
El origen de Sendero Luminoso en Ayacucho (aunque no sé cuán premeditadamente). Creo también que es obvia la influencia de este marco teórico en todo el informe; es más, acaso sea la influencia teórica que aparece más fuertemente en todo el texto. En el caso de la CVR, y del capítulo debatido en la mesa verde, los conceptos asociados a la teoría de la modernización permiten esbozar diferentes escenarios regionales según el impacto de la modernización, pueden verse tipos, diferencias, según sus alcances, relación con estructuras más tradicionales, etc. Esta discusión plantea temas interesantísimos como los impactos de la reforma agraria y su desmantelamiento, tipos de conflictividad, la importancia del tema de la fragmentación inter e intra comunitaria, etc.
Ahora bien, sí creo que la teoría de la modernización tiene limitaciones, que se expresan en el capítulo sobre las regiones, y en todo el informe de la CVR. Ellas tienen que ver con cómo se piensan las relaciones entre economía, sociedad y política. Esta teoría me parece muy útil para detectar tensiones y conflictos sociales, pero muy mala para, de allí, “deducir” qué pasa en el plano político. En este plano, donde están los actores, adquieren importancia la organización, la voluntad, las estrategias. En otras palabras, en una situación de movilización y conflicto potencial puede no pasar nada; y en otra de relativa estabilidad, puede producirse un gran estallido, dependiendo si es que hay actores que se empeñan en ello y son capaces de organizarse y movilizar recursos. Puede haber condiciones favorables para Sendero que se desaprovechan por sus propios errores, y otras desfavorables en las que Sendero se asienta por su habilidad o por errores en la estrategia contrainsurgente. En otras palabras, los actores importan. Esto significa que los escenarios de la violencia en parte responden a situaciones estructurales, pero también a la estrategia político-militar de Sendero, tema que me parece subestimado por la CVR (así como al tipo de respuesta contrainsurgente, por supuesto).
En la mesa verde del IEP, cada vez que se debaten las dificultades de asociar situaciones de “modernidad trunca” con la dinámica del conflicto, en realidad se está hablando de los límites de esta lógica que pretender “deducir” lo político de lo social. Este asunto se expresa también, por ejemplo, en la controversia siguiente: ¿hubo muchos muertos quechuahablantes de zonas rurales de la sierra porque nuestra sociedad es racista (y la “premodernidad” es muy fuerte), o porque la estrategia político-militar de Sendero definió como claves ciertos espacios regionales, donde se encontraba esa población? De haber definido otros, los muertos serían otros. En países como Argentina o Chile la insurgencia fue más urbana, y los muertos estuvieron en las ciudades.
Todo esto nos lleva a un tema mayor, que afecta a todo el informe de la CVR. El IF tiene una ambigüedad teórica que permite varias lecturas. Hay un informe que se lee en clave estructuralista, según el cual los problemas de la estructura social y sus contradicciones o tensiones explican “naturalmente” la dinámica del conflicto. En tanto el nuestro es un país profundamente injusto, la violencia alcanzó niveles muy altos. Hay otro informe en el cual lo central es la voluntad política de Sendero y su proyecto, que en realidad va a contracorriente de lo que ocurre en el plano de lo social, signado más bien por un proceso de democratización (y modernización). Soy de los que piensa que la segunda línea de interpretación es la correcta, y la noción de “modernidad trunca” es útil para entender en qué zonas del país Sendero tuvo más probabilidades de entrar o de encontrar resistencia. Y cómo la violencia asumió formas más macabras en zonas más marginales, signadas por una fuerte conflictividad local. Nuevamente, estamos hablando solo de probabilidades: lo que ocurrió en concreto se entiende mejor si incorporamos al análisis a los actores y sus acciones específicas.
Solamente unos apuntes para un tema que merece más discusión.